El Ministerio de Agricultura pretende “inutilizar” los estudios de la cadena de valor de los alimentos
Las últimas modificaciones propuestas eliminarían los costes de producción de cada eslabón, información básica para conocer la rentabilidad real de agricultores, industrias, mayoristas y cadenas de distribución. “Queremos pensar que esto no obedece a presiones de algunos eslabones porque supondría un serio retroceso en la transparencia a lo largo de toda la cadena”, ha subrayado Miguel Blanco, Secretario General de COAG
- COAG lamenta y se opone rotundamente a este hecho y así lo ha trasladado al Presidente del Pleno del Observatorio de los Alimentos, Fernando Burgaz.
Madrid, 19 de septiembre de 2016. La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) se opone rotundamente a las modificaciones planteadas por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente en los estudios de la cadena de valor de los alimentos porque supondrían un duro retroceso en la transparencia a lo largo de la cadena y en la relevancia y utilidad de los mismos.
La propuesta que plantea el MAGRAMA realiza una mera compilación de determinada información disponible respecto a precios y realiza una simple fotografía del recorrido de los productos del campo a la mesa. De esta forma se aleja de varias de las funciones encomendadas al Pleno del Observatorio de los Alimentos por la Ley 12/2013, de 2 de agosto, de medidas para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria. En concreto en la letra i) de su artículo 20 se encomienda al Observatorio a “analizar y estudiar de forma continuada la estructura básica de los costes y de precios percibidos y pagados así como los factores causantes de su evolución, en los productos de mayor importancia estratégica para el sector agroalimentario español”. También la letra h del citado artículo recoge como función “realizar estudios de carácter regular, encaminados a establecer un seguimiento sistemático de la formación de los precios finales de los alimentos”. Los estudios propuestos por el MAGRAMA no van encaminados en esta dirección, ya que no se centran en abordar la estructura básica de costes y precios en los eslabones, ni analizan formación de los precios finales de los alimentos – sólo los describen –, ni tampoco estudian los factores que determinan la posible evolución. “Conocer los costes de cada eslabón es básico para determinar la rentabilidad real de agricultores, ganaderos, industrias, mayoristas y distribución. Queremos pensar que la propuesta de eliminación no obedece a las presiones de algunos de los agentes de la cadena”, ha subrayado Miguel Blanco, Secretario General de COAG.
La propuesta que plantea el MAGRAMA realiza una mera compilación de determinada información disponible respecto a precios y realiza una simple fotografía del recorrido de los productos del campo a la mesa. De esta forma se aleja de varias de las funciones encomendadas al Pleno del Observatorio de los Alimentos por la Ley 12/2013, de 2 de agosto, de medidas para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria. En concreto en la letra i) de su artículo 20 se encomienda al Observatorio a “analizar y estudiar de forma continuada la estructura básica de los costes y de precios percibidos y pagados así como los factores causantes de su evolución, en los productos de mayor importancia estratégica para el sector agroalimentario español”. También la letra h del citado artículo recoge como función “realizar estudios de carácter regular, encaminados a establecer un seguimiento sistemático de la formación de los precios finales de los alimentos”. Los estudios propuestos por el MAGRAMA no van encaminados en esta dirección, ya que no se centran en abordar la estructura básica de costes y precios en los eslabones, ni analizan formación de los precios finales de los alimentos – sólo los describen –, ni tampoco estudian los factores que determinan la posible evolución. “Conocer los costes de cada eslabón es básico para determinar la rentabilidad real de agricultores, ganaderos, industrias, mayoristas y distribución. Queremos pensar que la propuesta de eliminación no obedece a las presiones de algunos de los agentes de la cadena”, ha subrayado Miguel Blanco, Secretario General de COAG.
Si bien desde COAG consideramos muy interesante, como se propone, incluir el balance de los productos a nivel general, con referencia a exportaciones, importaciones y mercados globales, dicha mejora queda desvirtuada al perderse la profundidad del análisis de la cadena como hasta ahora se venía realizando, que permitía conocer los posibles puntos de mejora en cada eslabón. De ahí que, tras examinar los últimos borradores trasladados por el Ministerio para ajo, cebolla, zanahoria, manzana y pera, COAG haya reclamado al Presidente del Observatorio, Fernando Burgaz, que en los trabajos se incluya de nuevo un estudio en profundidad y con detenimiento de la evolución de los costes de producción y su influencia en la rentabilidad de cada eslabón de la cadena para los distintos productos analizados, tanto en este caso, como en los productos ganaderos remitidos con anterioridad ( conejo, pollo y leche).